Hoy casi inaccesible, a la orilla del Pantano de Bolarque aun se pueden encontrar si sigues una senda casi borrada las ruinas del Desierto de Bolarque, un antiguo convento que tuvo su esplendor en el s. XVII y un conjunto de más de 30 ermitas.
En 1592, con piedras y ramas tres frailes carmelitas construyen la primera ermita en lo que era (y hoy vuelve a ser) un paraje remoto.
Ya entrado el siglo XVII se levantó un convento carmelita de mayor capacidad, con capilla, claustro, refectorio y bibilioteca. Existen actualmente restos de más de 30 ermitas que se fueron agregando en sus alrededores.
Ya entrado el siglo XVII se levantó un convento carmelita de mayor capacidad, con capilla, claustro, refectorio y bibilioteca. Existen actualmente restos de más de 30 ermitas que se fueron agregando en sus alrededores.
En las proximidades están las villas de Pastrana, Sayatón y Yebra.
Vistas del Río Tajo desde la Presa de Bolarque.
